- Escrito por Holly Honderich
- en Washington
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La vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, criticó a Donald Trump por las restricciones al aborto durante un mitin de campaña en Tucson, Arizona, el viernes.
El estado pasó a la vanguardia de la batalla por el aborto en Estados Unidos esta semana después de que la Corte Suprema estatal confirmó una ley de 1864 que prohibía casi todos los abortos.
“Donald Trump hizo esto”, dijo Harris.
Sus declaraciones se suman a los recientes ataques de la campaña de Biden que vincularon a Trump con la prohibición del aborto en todo el país.
Trump hizo campaña en 2016 para nombrar jueces que anularían Roe v. Wade. Puso a tres conservadores en la corte, todos los cuales votaron para revocar a Roe en junio de 2022 y derogar el derecho al aborto en todo el país.
«Todos tenemos que entender quién es el responsable», dijo Harris el viernes. «Donald Trump es el arquitecto de esta crisis sanitaria».
Afirmó que «el segundo mandato de Trump será peor… Firmará una prohibición nacional del aborto».
Un portavoz de la campaña de Trump negó apoyar una prohibición nacional y dijo que «no podría ser más claro. Estas son decisiones que la gente de todos los estados debe tomar».
La ley de Arizona, de 160 años de antigüedad, brindó a Harris y a sus compañeros demócratas otra oportunidad de centrar sus esfuerzos electorales de 2024 en el aborto, una estrategia que ha demostrado ser eficaz en las elecciones locales y estatales.
Trump buscó distanciarse de la prohibición impuesta por Arizona y llamó a los políticos del estado a derogar la ley.
Hablando desde su residencia de West Palm Beach el viernes por la tarde, Trump dijo que la ley de 1864 «será modificada por el gobierno».
Pero también se atribuyó el mérito de «romper» a Roe. “Hicimos algo que nadie pensó que fuera posible y lo trajimos de regreso a los estados, y los estados lo están haciendo de manera muy brillante”, dijo.
«Funciona como se supone que debe funcionar», dijo.
Carrie Lake, la presunta candidata republicana para un escaño vacante en el Senado en Arizona y aliada cercana de Trump, también abandonó públicamente la ley y el jueves calificó la prohibición como “fuera de lo común” a los ojos de los votantes estatales.
La señora Lake elogió anteriormente la prohibición calificándola de «gran ley».
Aún no está claro cuándo y cómo se implementará la prohibición de 1864.
La Corte Suprema de Arizona suspendió el fallo durante al menos 14 días mientras un tribunal inferior consideraba argumentos adicionales sobre la constitucionalidad de la ley.
La fiscal general demócrata del estado, Chris Mayes, dijo que no procesaría a nadie que realice u obtenga abortos. Los intentos iniciales de los demócratas de derogar la ley fueron frustrados en la legislatura estatal por los principales republicanos.
Los votantes de Arizona también pueden tener la oportunidad de revocar la ley ellos mismos a través de una posible iniciativa electoral que, si se aprueba en noviembre, protegería el derecho al aborto hasta la semana 24 de embarazo.
Los activistas pro-elección en el estado dicen que ya alcanzaron el umbral de firmas requerido para plantear la pregunta a los votantes este otoño.
